Una nueva demanda contra la empresa matriz de Pi Network, SocialChain Inc., está atrayendo la atención de toda la comunidad cripto. El caso, presentado por Harro Moen, residente de Arizona y usuario de Pi, se está llevando a cabo en el Tribunal de Distrito de los Estados Unidos para el Distrito Norte de California.
Moen acusa a SocialChain Inc., Pi Community Company y a los fundadores de Pi Network, Nicolas Kokkalis y Chengdiao Fan, de varias violaciones. Su denuncia incluye dos reclamaciones principales:
• Una transferencia no autorizada de aproximadamente 5.137 tokens Pi desde su wallet
• Pérdidas financieras basadas en lo que describe como una caída del precio de $307,49 a $1,67
Moen argumenta que estas pérdidas ascienden a casi $2 millones, utilizando un valor de token auto-calculado de $307 por Pi. Afirma que este número refleja el “valor real” de Pi durante las primeras etapas del proyecto.
Analistas cripto señalan que las reclamaciones de precios de la demanda se basan en un malentendido. El investigador Dr. Altcoin dijo que el precio de Pi Network nunca ha superado los $3 desde que los exchanges centralizados comenzaron a listar los pares IOU de Pi.
La cifra de $307,49, según él, no es un precio real de Pi. Proviene de los mercados IOU, donde los exchanges listaron tokens Pi no oficiales a pesar de que el Pi Core Team advirtió repetidamente a los usuarios que no los compraran. Estos precios eran especulativos, no regulados y completamente separados del ecosistema real de Pi Network.
La segunda reclamación de Moen implica un supuesto robo de 5.137 Pi. Afirma que los tokens fueron transferidos sin su permiso.
Los expertos dicen que esta reclamación también presenta problemas.
Según el Dr. Altcoin, la única forma en que alguien podría acceder a una wallet de Pi es obteniendo la frase de acceso o los detalles de recuperación del usuario. Sin pruebas directas de que el Pi Core Team accedió a su wallet, la acusación sigue siendo débil. Las brechas de seguridad en wallets suelen ser causadas por phishing o estafas, especialmente tras el avance de Pi hacia el mainnet abierto.
Moen también argumenta que algunos de sus tokens nunca migraron de la antigua aplicación de minería al mainnet, dejando su saldo “ilíquido”. Este problema ha sido ampliamente reportado por muchos usuarios en todo el mundo y no es exclusivo de su cuenta. Los analistas afirman que esto por sí solo no es suficiente para respaldar una reclamación de fraude.
Actualmente, los investigadores cripto consideran que la demanda tiene pocas probabilidades de prosperar. Gran parte del argumento gira en torno a los precios del mercado IOU, que Pi Network no controla, y a problemas de seguridad de wallets, que no pueden atribuirse a la empresa sin pruebas.
Aun así, los analistas señalan que el caso podría ejercer presión sobre el Pi Core Team para aumentar la transparencia, especialmente en lo que respecta a los plazos de migración, el soporte a los usuarios y el progreso del mainnet.
